Ante los hombres de negocios de EE. UU., el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, usa a Super Mario como ejemplo de su labor de gobierno.

Es difícil olvidar el momento cuando, durante el cierre de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, hizo acto de aparición el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, disfrazado como Super Mario. Para muchos fue algo muy emblemático, ya que la participación del fontanero en el evento fue una especie de homenaje a su larga trayectoria, y lo mismo puede extenderse a los demás personajes de la cultura pop japonesa.

Lo más insólito de todo es que Nintendo no desembolsó ni un solo yen para que su mascota oficial apareciera en dicha ceremonia. Fue la popularidad del plomero la que a final de cuentas dictaminó que él estuviera presente ahí, a lado de Hello Kitty, Doraemon, Pac-Man y Captain Tsubasa. Todos ellos auténticos iconos de la etapa moderna del país del Sol Naciente.

Y tal parece que una de las personas que todavía mantiene un buen recuerdo de Super Mario es el propio Anbe. Recientemente y mientras visitaba la ciudad de New York, dio un discurso en el evento Reuters Newsmaker. Ante muchos de los hombres de negocios más importantes del mundo, inicio éste con las siguientes palabras:

“Gracias. Muchas gracias.

Soy Shinzo Abe, no Mario. Pero como Mario, pienso, sigo luchando. Peleo para impulsar la economía de Japón.”

El que haya tomado a este personaje como ejemplo, al menos para mí, es muy significativo. Si por algo se ha destacado Super Mario a lo largo de los años es que nunca se rinde. No importa el enemigo que enfrente, él siempre estará dispuesto a enfrentarlo con toda la entereza y valor posible. De cierta manera, yo veo al plomero como un reflejo de la propia Nintendo.

A lo largo de sus ya más de 127 años de existencia, la compañía siempre ha encontrado la forma de salir adelante. Antes de dedicarse a los videojuegos, tuvo muchas otras aventuras financieras. Y ante los cambiantes tiempos actuales, busca adaptarse de la mejor forma posible. Tal vez no tan rápido como algunos quisieran, pero cuando hace un movimiento casi siempre lo hace en el momento justo.

Super Mario es probablemente el personaje más famoso de los videojuegos, y por segunda vez, su fama sale a relucir. ¿Podrá algún día otra serie presumir que un jefe de estado la use como ejemplo? Este es el resultado de una historia de permanencia que se extiende por más de 30 años.

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