Apelar a la nostalgia es a lo que recurren TV Azteca y Televisa para llamar la atención de los fans del anime en México. Otra señal de la crisis que viven.

Si, así como pueden verlo, entre comillas. Sinceramente, sería pecar de inocente como para decir que lo que estamos viendo es el regreso del anime en México. Durante estos días, hemos visto prácticamente una “guerra” de anuncios de parte de TV Azteca y Televisa. El primer cañonazo llegó de parte de la televisora del Ajusco, cuando reveló que exhibiría Pokémon XY en nuestro país.

¿Renacimiento del anime en México o llamarada de petate?

Algo por demás curioso, ya que originalmente era la empresa de Emilio Azcárraga Jean la que se encargaba de eso hace ya varios años. Pero como era de esperarse, su principal rival televisivo no se iba a quedar de brazos cruzados. Días después se dio a conocer que la serie clásica de Los Caballeros del Zodiaco, sería transmitida por el Canal 5.

El canal Capital 21 de la Ciudad de México anunció que transmitirá Gintama en su barra de programación. Tendremos que ver que tan bien recibida es esta gran serie.

“¡Es el mundo al revés!”, como diría cierto político mexicano, algo que las generaciones más veteranas de fans del anime en México reconocerán. Después vinieron más anuncios de parte de TV Azteca, como son el de la transmisión de Súper Campeones, y en días más recientes, el retorno de la serie original de Sailor Moon. Y todavía está pendiente quien se quedará con los derechos de Dragon Ball Super en nuestro país.

¿De verdad esto representa el “regreso” de la animación nipona a la República Mexicana? A mi parecer, en realidad nunca se fue, y creo que actualmente está más presente que nunca. Y no, no me estoy refiriendo a la oferta de la televisión abierta, a pesar de la casi omnipresente presencia de Dragon Ball Z en Canal 5, o los loables esfuerzos de parte de Canal 22.

Pasado que muchos de nosotros recordamos con cariño

Después de la llamada “época dorada” del anime en México, los dos gigantes televisivos, Televisa y TV Azteca, le dieron prácticamente la espalda a los fans de este medio de entretenimiento. Así nada más; no les importó en lo más mínimo seguir trayendo series nuevas. Lo peor de todo es que ambas tenían un acervo enorme de éstas, que recuerdan los más experimentados.

Canal 22 tiene el mérito de transmitir series como Neon Genesis Evangelion, Hellsing, Ghost in the Shell: Stand Alone Complex, Ghost in the Shell: S.A.C. Second Gig y Serial Experiments Lain.

Tan solo la primera llegó a transmitir Remi, Astroboy, Mazinger Z, Yam Yam y el Genio, El Duende Mágico, Kimba, el león blanco, Las Aventuras de Gigi, Meteoro, Doraemon, Los Gatos Samurai, Dragon Ball y sus sucesoras, Dr. Slump, Cazafantasmas Mikami, Ranma 1/2, Card Captor Sakura, Digimon, Shaman King, Pokémon, y en años más recientes, Naruto.

En cuanto a la segunda, muchos recuerdan con cariño desde los tiempos de Imevisión series como Candy Candy o La Abeja Maya, hasta el arribo varios años después de B’tX, Las Aventuras de Fly, Inuyasha, Las Guerreras Mágicas, Los Caballeros de Kodai, Sailor Moon, las sucesivas entregas de Los Caballeros del Zodiaco, Slam Dunk, Slayers, La Visión de Escaflowne, Zenki y otras más.

Cuando el anime halló su propio camino hacia los fans.

¿Qué hicieron los seguidores cuando se cerró “el grifo” de contenidos? Muchos recurrieron al cable, que en su tiempo tuvo buenas opciones, primero en la forma de Locomotion, que ya no existe, y después con Animax, que cambió por completo su programación y que terminó por decepcionar a muchas personas. Sin embargo, el anime en México encontró el verdadero camino: la Internet.

Internet de verdad vino a “girar las tornas”. Cuando comenzó a popularizarse le abrió las puertas a contenidos con los cuales en otras épocas apenas habríamos soñado.

Mientras los emporios televisivos los ignoraban, las viejas y nuevas generaciones de fans hallaron otra manera de disfrutar lo que más les gustaba. Ya sea de forma legal o ilegal, las producciones niponas llegaron a sus manos. No tenían que experimentar forzosos cortes comerciales, las interminables repeticiones, la molesta censura, series incompletas, o la modificación de contenidos para ajustarlas a un público menor de edad.

La Red de Redes fue la puerta de salvación del anime en México. Su práctica desaparición en televisión abierta pasó desapercibida para varios, que ahora podían estar al tanto de lo que pasaba en Japón. Algunos, recurriendo a la compra o importación de DVDs, e incluso aprendiendo japonés por su cuenta. Pero varios más a los fansubs que como hongos surgieron por todos lados.

El auge de la Red de Redes y la transmisión de datos

Conforme avanzó la tecnología, algunas cosas cambiaron. Un mayor ancho de banda hizo más fáciles las cosas, y lo mismo pasó con la compresión de video. Pero sobre todo esto flotaba un aura de ilegalidad, con el empleo de servicios de descarga directa y redes P2P. Opciones como Crunchyroll, Daisuki y Netflix solo terminaron por redondear las cosas a muchos aficionados.

El auge y éxito de series como One Piece, Attack on Titan, Tokyo Ghoul, Nanatsu no Taizai, JoJo’s Bizarre Adventure, One-Punch Man y otras más se dio a través de la Internet.

¿Qué importaba que no pasaran anime en Televisa o TV Azteca, si el Internet y sus servicios asociados están más presentes que nunca? Quien quisiera ver este tipo de programas bien podría hacerlo. Ni siquiera necesita de la televisión por cable o satelital. Solo pagando un poco más acceden a una gran cantidad de series de forma legal, de las muchas que se estrenan temporada tras temporada en Japón.

Pero mientras esto sucede, ambas empresas padecen una profunda crisis. Los años de duopolio televisivo tuvieron sus consecuencias. Pensaron que la audiencia siempre estaría cautiva, y que sea lo que sea que transmitieran, lo aceptarían las dóciles masas. Pero el cambio de televisión analógica a digital fue el primer mazazo de realidad tecnológica que ambas enfrentaron.

Anime con su dosis de nostalgia: ¿Volverá a funcionar?

De golpe perdieron un gran sector que habían retenido por años, y se dieron cuenta que las generaciones más jóvenes, en lugar de seguirlos, simplemente los ignoraban. ¿Para qué volver a ver la oferta de la televisión abierta mexicana, si con mi móvil, tableta, computadora o televisor inteligente tengo acceso a programación internacional como el mismo anime?

Canal 22 estrenará próximamente la serie de Yama no Susume (Encouragement of Climb) en su programación. Una serie que arrancó en 2011 y que tendrá su tercera temporada en el 2018.

Ahora, la estrategia que ambas están siguiendo es otra: recurrir a la nostalgia. Es notoria su incapacidad de generar contenidos de calidad. Incluso su producción de telenovelas, series cómicas o programas originales están a la baja. Y ahora recurren a franquicias o al poder de los recuerdos para atraer una audiencia que hace años siguió su propio camino. Sí, es posible que algunas personas deseen ver de nuevo estas series, simplemente para revivir su infancia o juventud.

Pero habrá otros que simplemente no morderán el anzuelo. Muchos no los verán simplemente porque en Japón se estrenan cada estación de 30 a 40 nuevas series. ¡Hay mucho de donde elegir en multitud de géneros, sin descontar lo acumulado con los años! El gusto por el anime en México sobrevivió, y esto no fue gracias a los esfuerzos de Televisa o TV Azteca.

Tendremos que ver cuando durará este supuesto “renacimiento” del anime en México. Pero en cuanto lleguen los primeros ratings negativos, volveremos a decirles adiós. Por cierto, TV Azteca parece que está pasando capítulos de la primera temporada de Pokémon… ¿no que era XY?

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